16.4.06

La Plata, ciudad desigual


El casco urbano y los barrios de la zona norte de La Plata tienen una alta densidad de viviendas confortables y bien provistas de servicios y electrodomésticos. Delegaciones municipales de la zona oeste como Arturo Seguí, el Peligro y Melchor Romero, en cambio, incluyen una mayor proporción de viviendas precarias y pobremente equipadas. Un trabajo de la Dirección General de Estadística y Evaluación de Programas Especiales de la Municipalidad de La Plata, realizado en función de datos del INDEC procesados por la Dirección Provincial de Estadística, es bastante concluyente: en el casco Urbano, Gonnet, Tolosa y Ringuelet predominan las viviendas construidas con materiales resistentes y sólidos en todos sus parámetros: pisos, paredes y techo. Además, incluyen todos los elementos de aislación térmica y terminación. En City Bell y Villa Elisa, y en menor medida Villa Elvira, Los Hornos, San Lorenzo y Hernández, la calidad de las construcciones es más que aceptable, pero en Lisandro Olmos y Gorina - y más aún en Abasto y Etcheverry - la calidad de las terminaciones no es tan buena. En Arturo Seguí, El Peligro y Melchor Romero, en tanto, la descripción de la mayoría de las viviendas corresponde a alguno de los siguientes tres tipos:
- Materiales resistentes y sólidos en todos los parámetros pero faltan elementos de aislación o terminación en al menos uno de sus componentes (pisos, paredes, techos).
- Materiales resistentes y sólidos en todos los parámetros pero le faltan elementos de aislación o terminación en todos sus componentes; o bien presenta techos de chapa de metal o fibrocemento u otros sin cielorraso; o paredes de chapa de metal o fibrocemento.
- Materiales no resistentes ni sólidos o de desechos al menos en uno de los parámetros.
La última carecterización, que se corresponde con las viviendas precarias, sirve de hogar a 1 de cada 8 familias de El Peligro, 1 de cada 13 de Melchor Romero, 1 de cada 16 en Abasto y 1 de cada 17 en Etcheverry y Arturo Seguí. En cambio, el 96% de las familias del casco urbano vive en viviendas de calidad óptima. Y lo mismo sucede en más de un 80% de los casos en Gonnet, Tolosa y Ringuelet.
Equipamiento
La calidad de vida de las familias platenses también está realacionada con la provisión de servicios: allí el quiebre entre delegaciones pobres versus barrios ricos es similar. Por ejemplo, más del 20% de los hogares de Melchor Romero, El Peligro, Arturo Seguí, Etcheverry y Abasto no tiene conexión de agua en su cocina. Para colmo, ni siquiera tiene agua en su hogares el 36,4% de las viviendas de Melchor Romero, el 34,3% de las de El Peligro, y el 31,6% de las de Arturo Seguí.
Respecto del equipamiento de los hogares, más del 90% de todos los barrios excepto Melchor Romero (89,3%), Abasto (89%) y El Peligro (88%) tiene heladera. En el casco urbano, los hogares también están debajo del 80% (76,3%), pero en ese caso el indicador debe reflejar la incidencia de los departamentos pequeños alquilados a estudiantes del interior.
En Romero, Abasto y El Peligro, más del 10% de los hogares no tiene heladera ni freezer. En El peligro, más de un tercio no posee lavarropas, mientras en que Abasto, Melchor Romero y Etcheverry cerca del 30% de los hogares está en esa situación. En contraste, en Gonnet el 88,7% posee el electrodoméstico. Y casi todos los lavarropas son automáticos.
Otro indicador interesante tiene que ver con la computación: en promedio el 32,1 % de las familias posee al menos un ordenador personal, y cerca de la mitad de ese universo cuenta asimismo con acceso a internet, pero la distribución es despareja: en Gonnet el 49,7 % de los hogares tiene PC, y el 56,6% de ese universo restringido conexión a la web. En cambio, en el Peligro sólo el 8,5 % de las viviendas tiene computadoras y en Lisandro Olmos sólo el 26,2% de las PC está conectada a la red. Como se ve, la situación es despareja y permite contar con algunos elementos que permiten visulizar dos cosas: la calidad de vida promedio en cada uno de los barrios y las principales necesidades primarias de las localidades más pobres.